Dia D O C E

Ya nieva. Uno, nacido en las aridas tierras del exotico Mexico podria pensar que la sensacion seria similar a ver caer del cielo bolas de nieve de limon, nada mas lejano. La nieve parece algodon que alguien puso a volar. El frio solo es en el ambiente, por que la nieve no enfria la piel y apenas moja cuando se funde sobre la ropa. Y ver al aliento congelado es como para pensar que cuando se hable las palabras saldran congeladas. Que se tendra que portar consigo uno de esos aparatitos que se usan para calentar el ambiente en el banio cuando se pretende una ducha para lavar el cuerpo que con el paso de los dias parece mas y mas europeo (por aquello de los olores).
Hoy cenamos pizza, una pizza no tan delgada como las que habia comido antes en una casa de suenio. Dos recamaras, una estancia con X-Box que aca es tan comun como lo podria ser ahora en Mexico el playstation UNO, ademas de un equipo de sonido sonido soundrround como para ver Matrix en DVD y morirse cuando Keneau Reeves cuando cae del edificio. Una cocina lo suficientemente grande como para cocinar pizzas y lasagna. Hay por lo menos 4 televisiones cada una con su equipo de juego.
Con que comodidad se vive por estos lares. Alguien podria decir que su precio se ha pagado. Que cuando las guerras mundiales pocos podrian envidiar la vida en el viejo continente. Y sin duda tendrian razon, pero quien ahora vive aca y disfruta de estas ventajas poco tuvo que ver con aquel periodo, aunque en la sala se recree el desembarco en Normandia con el X - Box y el Medal of Honor.
Ahora nieva y nieva mas fuerte. Si todo continua como va por la maniana las calles despertaran blancas