Noche Blanca
Milan, como muchas ciudades europeas, sea en la Italia pre y post Berlusconiana (todo parece indicar que el dueño del Milan, y Mediaset, es decir la mitad de la televisión privada que se transmite publicamente esta vez no conseguirá la reelección) que en la convulsionada Francia de Chirac y Villepan o en la España -que parece decir adios a la vida bajo el miedo a los separatistas vascos extremos- de Zapatero celebra cada año su Noche Blanca.
Milan como Paris, Madrid, Brusellas, Roma y hasta Montereal ha retomado la idea del ex alcade de Paris Bertrand Delano para ofrecer a sus ciudadanos y a los no ciudadanos también una noche para recorrer la ciudad, para hacer suyas las calles, los parques, las salas de cine, los museos, los bares y las tiendas en uan fiesta non stop durante toda la noche.
Y si en Roma cada año son 2 millones de italianos los que aprovechan está llamada Noche en Blanco, en el norte del país de la bota, justamente en una de las capitales de la moda, es decir Milan, al respuesta suma aproximadamente 800 mil milaneses e invitados, de acuerdo con los diarios de la región.
Y sí, como lo prometía la publicidad, como lo aseguraban la propaganda que tapizó muros y calles –rivalizando con la propagada política sea de Romano Prodi, la “seriedad” en el gobierno que de Silvio Berlusconi “Mr. Showman”- la tarde del sábado no terminó hasta la madrugada del domingo, con el lento y cansado regreso a casa entre montañas de envases de botellas de cerveza –y vaya que la Corona se consume por estos lares- y vino vacías.
La oferta de la Notte Bianca, comenzó con la presentación del Circ du solei en la galería (un pasaje) más famosa de la ciudad, la que comunica a la Plaza del Duomo con el teatro de La Scala. Y de ahí nada pudo detener a la marea humana. Ni siquiera los empujos, apretujones y hasta desamayados (que supongo los hubo) en las horas picos ahí en plaza del Duomo, donde miles jovenes se congregaron respondiendo al llamado de la MTV italiana y Radio 105 para la entrega de unos premios a “lo mejor de la música italiana” (la que ellos transmiten, se entiende).
Mundo Marcio, el nuevo fenónome hip hop italiano; los ex emergentes de Negramaro, y las ya no tan adolescentes rusas TaTu y muchos cantantes más ocuparon las plaza hasta el amanecer del domingo, provocando que la plaza fuera el centroneuralgico al menos de la zona.
Mientras que en Vía Torino y Vía Napoleone el shopping hacía brillas las tarjetas de crédito y de débito, por que si de algo saben en esta ciudad es de moda y como negarlo si las calles estaban llenas de mujeres totalmente fashion (colocar acá la firma de su preferencia, todas estuvieron presentes, puedo apostar por ello).
Un festival sin subtitulos
En las inmediaciones de la plaza de nuevo a un costado de La Scala, el Festival cinematográfico de Africa, Asía y América Latina ofreció una seleción de documentales y películas, casi todas sino es que todas en la lengua original. Con la posibilidad de audifonos para seguir la narración, que si bien en cierto de una imagen dice más que mil palabras de nada sirven cuando las palabras están en un idioma del que dificilmente podrías deducir cualquier cosa. Cómo fue mi caso.
domingo, marzo 26, 2006
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